Confidente
Antoni Gaudí, uno de los mejores arquitectos internacionales de finales del siglo XIX y principios del XX, fue también un audaz diseñador de muebles, rejas y otras piezas decorativas de algunos de sus edificios. Para las sillas de la Casa Batlló, en el paseo de Gràcia de Barcelona, el arquitecto planteó un tipo de asiento, inédito hasta aquel momento, que busca las formas redondeadas que se ajustan a la morfología humana, prescindiendo de tapizados y de las ornamentaciones superfluas de la época para dejar la forma desnuda. Gaudí fue precursor de los diseños ergonómicos, rompiendo con los repertorios académicos y anticipándose al diseño industrial, como hicieron arquitectos coetáneos como Victor Horta, Mackintosh o Saarinen.Esta obra está seleccionada para el proyecto "Partage Plus - Digitising and Enabling Art Nouveau for Europeana"
c. 1904-1906
104,5 x 167 x 75,5 cm
Obra cedida en comodato por la Fundación Junta Constructora del Templo Expiatorio de la Sagrada Familia, 1991
156070-000