La donación de fotografías de Josep Maria Casals i Ariet (Viladrau, 1901-Barcelona, 1986) efectuada por su hija, Gabriela Casals Roig, consta de 254 bromóleos transportados, 1.164 diapositivas de color y un amplio repertorio de copias del trabajo -más de 13.000 ejemplares sobre papel, acetato y vidrio- que permiten acercarse de manera privilegiada al proceso de creación del artista.

Esta donación enriquece de forma extraordinaria la colección de fotografía del Museu Nacional d’Art de Catalunya que cuenta con la más amplia representación de obras que se conservan de este maestro del pictorialismo catalán. El excepcional conjunto, único en las colecciones públicas del país, y de un gran valor artístico y patrimonial, se encontraba en depósito en el museo desde el año 2006. El director del Museu Nacional d’Art de Catalunya, Pepe Serra, quiere destacar muy especialmente "la gran tarea realizada por la familia, que ha permitido la preservación de la obra de Casals i Ariet, así como la generosidad de la hija del artista al hacer esta donación".

Josep Maria Casals i Ariet fue uno de los principales exponentes catalanes del pictorialismo, movimiento surgido en las últimas décadas del siglo XIX con el propósito de elevar la fotografía a la categoría de arte mediante la reproducción de temas pictóricos y el uso de elaborados recursos técnicos de positivado. La amplia producción de Casals i Ariet, está formada por paisajes montañosos, marinas, vistas de puertos, naturaleza muerta y retratos, temas que resolvió con un gran sentido de la luz, los valores atmosféricos y la composición, así como con pleno dominio de la técnica pigmentaria del bromóleo transportado, que otorga a las fotografías cualidades cercanas a los grabados, además de una mayor estabilidad. 

Fiel a la estética pictorialista a lo largo de toda su vida, Casals dio a conocer su obra en diversas exposiciones celebradas en la Agrupación Fotográfica de Cataluña -institución de la que fue socio- y en otras muestras locales, nacionales e internacionales. En el año 1994, fue objeto de una primera retrospectiva, Casals i Ariet, el darrer clàssic (Centro Cultural de la Fundación La Caixa, Vic).