Secreciones es una obra representativa del período Pop de Mari Chordà. La singularidad de esta artista yace en la representación de la sexualidad femenina de forma directa y corporal. Chordà se convertirá, en los años setenta, en una de las protagonistas del movimiento feminista y una de las impulsoras del centro y editorial La Sal, de Barcelona.
Formaba parte de una serie que corresponde a los distintos meses de un embarazo, en este caso el de la propia artista. Podemos considerar la pieza, pues, como un autorretrato y una maternidad, con una mirada a la vez íntima y transgresora que se expresa con un estilo psicodélico, característico de la época del Pop. Mari Chordà se convirtió, en las décadas siguientes, en una de las protagonistas del movimiento feminista y una de las impulsoras del centro y editorial La Sal, de Barcelona.
Formaba parte de una serie que corresponde a los distintos meses de un embarazo, en este caso el de la propia artista. Podemos considerar la pieza, pues, como un autorretrato y una maternidad, con una mirada a la vez íntima y transgresora que se expresa con un estilo psicodélico, característico de la época del Pop. Mari Chordà se convirtió, en las décadas siguientes, en una de las protagonistas del movimiento feminista y una de las impulsoras del centro y editorial La Sal, de Barcelona.
Formaba parte de una serie que corresponde a los distintos meses de un embarazo, en este caso el de la propia artista. Podemos considerar la pieza, pues, como un autorretrato y una maternidad, con una mirada a la vez íntima y transgresora que se expresa con un estilo psicodélico, característico de la época del Pop. Mari Chordà se convirtió, en las décadas siguientes, en una de las protagonistas del movimiento feminista y una de las impulsoras del centro y editorial La Sal, de Barcelona.